Poco pudo hacer el mejor tenista uruguayo en su tercera semifinal en esta clase de torneos, pese a jugar bien e intentar de todo, su rival estuvo realmente encendido. Trocki no erraba una, le devolvía todas las pelotas al salteño, y su servicio fue letal.
En la primera manga Pablo sorprendió quebrando en el primer game, en lo que sería su unica oportunidad de quiebre en todo el encuentro. De todos modos, en el siguiente juego no iba a poder confirmarlo, y cuando Cuevas sacaba 2-3, luego de un extenso game en el que el charrúa salvó 4 chances de quiebre, el serbio finalmente conseguiría quebrar para después cerrar el parcial por 6-3.
En el segundo set se le haría todo aún más dificil al uruguayo, ya que cada juego de saque se le hacía complicado poder confirmarlo y sumado a esto, fue casi imposible generarle inconvenientes cuando Troicki estaba al servicio, tal es así que apenas pudo quitarle 6 puntos en todo el segundo set.
De esta manera el uruguayo cerró una semana realmente espectacular, dónde, si bien queda la espina por haber estado cerca y no alcanzar su primera final, Pablo se puede ir tranquilo porque hoy intento absolutamente todo pero no le bastó.
Hay que tener en cuenta que tenía por delante un cuadro que era muy dificil y muchos pensaban que se como mucho se iría en segunda ronda, pero Cuevas terminó sorprendiendo a grandes favoritos, dejando por el camino a jugadores como el ruso Nikolay Davydenko y el checo Radek Stepanek, y ante ambos nada más ni nada menos que en sets corridos.
Además, con esta actuación Pablo se asegura 45 unidades para el ranking, ya que si bien 90 son los que se otorgan por llegar a semifinales, el salteño defendía la mitad de los puntos. Aún así, podrá avanzar algunas posiciones.
Ahora, lo próximo para el uruguayo será el ATP 250 de Viena, dónde debutará en primera ronda ante el peligroso jugador holandés, Thiemo De Bakker, número 44 del mundo y que esta temporada tiene un buen récord de 28-21 en el ATP World Tour.
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